Lo llamo la reflexión del tigre enjaulado. Paseas de un lado para otro, encerrada en tu cuarto. Vas, vienes, vuelves y por tu cabeza van pasando imágenes, recuerdos, deseos, esperanzas, temores, sueños. Vas y vuelves, recorriendo las mismas baldosas una y otra vez hasta desgastarlas.

Lo llamo la reflexión del tigre enjaulad...