Escondedme en la mezcla
de tétricas o silvestres ambiciones
en que, purpurina, arde la existencia;
por lo demás, dejad millones de harapos
a esos individuos saqueadores.
A vueltas viajaremos
al pillaje o al cobijo penetrante
pero armad en silencio mis pulmones
pues sólo me reanima hacer poesía,
el sexo o el amor, según que día;
sentir que cualquier inocencia es juventud…
no puedo describíroslo mejor,
mas con muecas entonces,
tranquilos, conozcamos
como se hacían los auténticos libritos;
tendré que crearlos
con cólera y oficio de borracho
y dejar muy naturales los bloques del trabajo
pues ya lo dijeron muchos vates antes en latín…
yo sólo aullaré hasta dejarte sorda como estabas
y despedir una vez más nuestra alegría.

Escondedme en la mezcla de tétricas o silvestres...